Cobos y Sanz, más cerca de la propuesta de Pro

El líder de Pro, Mauricio Macri, introdujo una cuña en el radicalismo con su convocatoria a firmar un acuerdo opositor de políticas públicas. El vicepresidente Julio Cobos fue el único en coincidir públicamente con la propuesta del jefe de gobierno porteño, mientras que el candidato presidencial de la UCR, Ricardo Alfonsín, se llamó a silencio, en una clara señal de distanciamiento del macrismo.

También el senador Ernesto Sanz optó por el silencio, aunque se sabe que su postura es contraria a la de Alfonsín. En efecto, el mendocino -que enfrentaría a Alfonsín en las primarias de agosto por la candidatura presidencial de la UCR- es partidario, al igual que Cobos, de articular un frente electoral lo más amplio posible. En esta lógica, alienta acuerdos puntuales con el Peronismo Federal y con Pro, sobre todo en Buenos Aires y en la Capital.

En la misma línea milita Cobos. "Desde hace tiempo, estamos de acuerdo con discutir seria y responsablemente políticas de Estado. Considero que la invitación debe estar dirigida a todos los partidos políticos, tanto del oficialismo como de la oposición, independientemente de que acepten participar o no", expresó ayer, por medio de un comunicado.

"Hoy tenemos la oportunidad de construir un país a largo plazo. La agenda de temas propuestos debe ser abierta y contemplar los diferentes aportes -enfatizó el vicepresidente-. Existe un amplio sector de la sociedad que reclama grandes acuerdos, con metas colectivas para el bienestar general. Frente a este pedido, sería bueno que una vez definidos los candidatos presidenciales, ellos y sus espacios políticos se comprometan públicamente a poner en práctica y respetar las políticas que eventualmente se acuerden."

La apertura que exhibe Cobos hacia acuerdos electorales con otros partidos no progresistas no es compartida por el núcleo duro de la UCR, que la semana pasada consagró a Alfonsín como su candidato. Cobos criticó la cerrazón de su partido y anunció que, en estas condiciones, no será candidato a presidente.

Sanz, en cambio, decidió continuar en carrera, por ahora. Si bien prefirió no opinar públicamente sobre la convocatoria macrista, es sabido que comparte su esencia. De hecho, anteayer difundió una carta a sus correligionarios en la que propuso abrir "un proceso de diálogo [con otras fuerzas políticas] lo más amplio posible, sin prejuicios y sin exclusiones".

"Estoy convencido de que esta alternativa tiene que ser de amplia base y de composición plural, no puede quedar confinada a un espacio ideológico concreto. Tiene que ser políticamente coherente, por eso lo más importante ahora no es anticipar fórmulas, sino profundizar los contenidos que podamos compartir", sostuvo.

Sin embargo, las posiciones de Sanz y de Cobos no encuentran eco en el alfonsinismo, que blindó el partido en torno de la candidatura de Alfonsín y de una política de alianzas concentrada básicamente en el Partido Socialista y GEN. En una reunión de dirigentes cobistas, presidida por el vicepresidente, se le reclamó a Sanz que reasuma la jefatura de la UCR, por considerar que la actual conducción, a cargo del alfonsinista Angel Rozas, no es imparcial. Rozas se encontrará hoy con Cobos para intentar sortear estas diferencias.

Laura Serra
LA NACION