El Gobierno sacó una guía para hablar de sexo con los hijos

Da consejos sobre temas tabú, derriba mitos y dice cómo cuidar a los chicos.

El Programa Nacional de Educación Sexual Integral es ley desde 2006. Obliga a las escuelas primarias y secundarias a dar educación sexual. Ya pasaron cinco años y hay una deuda: se avanza lento, en algunas provincias más que en otras. La norma abarca no sólo a los alumnos, sino también a los padres: el artículo 9 dice que el Estado debe organizar para ellos “espacios de formación” en los colegios. Ayer, el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni, tradujo esto en la presentación de una guía bautizada “Educación Sexual Integral para charlar en familia”, que aconseja a los mayores cómo hablar de sexo con sus hijos.
¿Quién la escribió? “Un equipo técnico de los ministerios de Educación, Salud y del Fondo de Población de Naciones Unidas”, dijo a Clarín Mirta Marina, coordinadora del Programa Nacional de Educación Sexual Integral. “Se relevó a familias que representan la heterogeneidad de nuestro país, para saber cuáles eran las preguntas más frecuentes que se hacían sobre el tema”, agregó.
Los contenidos se presentan en forma de revista (48 páginas), con textos explicativos y situaciones hipotéticas con ilustraciones. “Esta es la bombacha nueva que me regaló la tía, ¿vos qué bombacha tenés?”, dice una nena mientras levanta su pollera y la de su madre. El texto posterior señala: “Son buenas oportunidades para conversar, sin enojarse, sobre la propia intimidad y el respeto por la intimidad de los demás”. La guía también asegura que es importante que los chicos conozcan los nombres verdaderos de sus partes íntimas , más allá de los eventuales “sobrenombres” que use cada familia.
Otra recomendación es no retar a los más pequeños cuando se tocan sus genitales. Pero se aclara que hay que advertirles que no lo hagan en público, sino “cuando van solos al baño”.
Sobre cómo explicar la llegada de los bebés , la revista aconseja no decir más de lo que los chicos necesitan saber: “Podemos contarles que hay momentos íntimos en que las parejas se abrazan, se hacen caricias, se dan besos y juntan sus partes íntimas. De estos encuentros puede resultar que la mujer quede embarazada”.
Otras dos páginas se dedican a recomendar cómo contarles a los hijos adoptivos su origen: “Es conveniente que la familia adoptante pida una copia del expediente judicial. Con estos datos pueden ir buscando la mejor manera de contarle su historia”, dice. Y agrega: “Todos tenemos derecho a la identidad”.
En otras partes se aconseja: enseñar a no discriminar por la apariencia física, alertar a las nenas sobre la primera menstruación para que no se asusten, hacer que los chicos vivan la masturbación sin culpa, que usen siempre preservativo y, sólo para los casos de emergencia, la “píldora del día después”. También se habla de dar apoyo familiar a los chicos y chicas gays o lesbianas.
Se imprimieron 6 millones de ejemplares que se distribuirán desde la semana próxima en colegios, centros de salud, ONG’s y centros comunitarios de todo el país. Mara Brawer, subsecretaria de Equidad y Calidad Educativa, dice en el cierre de la publicación: “Imaginamos que han encontrado información, ideas nuevas y algunos temas que les generaron sorpresa. Imaginamos también que no siempre han estado de acuerdo, pero se han quedado pensando”.
Fuente: Clarín.