El temor a las protestas y a un atentado sobrevuela la boda real

Más de 5.000 policías se desplazan en la ciudad para garantizar la seguridad. Le han pedido al público que está en la calle “ser vigilante y cauteloso”.

Londres se prepara para la celebración de la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton, el 29 de abril e 2011

Miedo a las protestas de los musulmanes, pero también temor a un atentado terrorista en Londres para el día de la boda real entre el príncipe William y Kate Middleton. Más de 5.000 policías se desplazarán en la ciudad para garantizar la seguridad. Le han pedido al público que está en la calle “ser vigilante y cauteloso”.

La policía está recorriendo en el centro de Londres en búsqueda de los explosivos y haciendo detenciones preventivas de anarquistas, que amenazan también con arruinar las celebraciones. Un helicóptero con cámaras de alta definición sobrevuela la capital británica para apoyar a la policía en el terreno.
Scotland Yard, la policía británica, rechazó el pedido de un grupo radical islamista llamado "Musulmanes contra los Cruzados" para manifestarse afuera de la Abadía de Westminster el día del casamiento. Proyectaban quemar una imagen de la reina Isabel y de los recién casados.
Ahora este grupo minoritario, que no asistió a las entrevistas para coordinar sus manifestaciones con la policía como la legislación exige, ha dicho públicamente que suspende sus protestas “ante la alta posibilidad de un atentado" y para “no exponer a los musulmanes al peligro”. Un probable golpe publicitario, pero que inquieta a la policía. El mismo grupo quemó una bolsa de amapolas, el signo de los caídos en las guerras británicas, durante el día del armisticio, el pasado 11 de noviembre.
Lynne Owens -asistente del comisionado de policía- dijo que había negociaciones con los grupos que buscaban protestar, pero que la boda real no sería perturbada por ninguna marcha. Además dijo que están listos para impedirlo.
La policía británica tiene poderes para prohibir marchas sobre la ruta que los novios tomarán del Palacio a la Abadía. Pero será difícil de controlar más manifestaciones en otras partes del centro de Londres.
Otro desafío para la policía será la evacuación del campamento pacifista contra las guerras británicas ubicado en Parliament Square, en la plaza donde debe instalarse la orquesta militar de la boda. Hasta ahora Boris Johnson, el alcalde de Londres, no consiguió que la justicia autorizara su expulsión.

Fuente: Clarin.