Con voz de mujer

Lucas Martí y Varias Artistas El hermano de Emmanuel Horvilleur vuelve a hacer canciones para que canten mujeres.

INVITADAS DE LUJO Martí invitó a Julieta Venegas, Emme y Déborah de Corral.

Lucas Martí es, a los 31 años, un rara avis en la tierra del rock y del pop nacional. También artista plástico, desde hace 15 descarga su verborragia cancionera en proyectos con etiqueta de culto, como A-Tirador Láser, o su carrera solista. Ahora fortalece otra veta: la de prestar sus canciones para algunas de las voces femeninas más interesantes del pop local y latino. Se puede es el nuevo disco de Varias Artistas. Y Varias Artistas es el resultado de la ecuación Martí + Ezequiel Kronenberg (músico de Rosal) + una docena de féminas. Se puede también es hermanastro de Papá, un disco de 2007 de la misma dupla autoral, también con voces de mujeres.

"Es una continuación. Muchos temas que yo había hecho en Papá, como la idea surgió de un día para el otro, no estaban planeados para ese proyecto. Este disco está todo pensado, usando no muchos parámetros, usando la intuición. Y está más desarrollado", describió a Clarín.De los nombres femeninos que integran el combo Varias Artistas, la mayoría se repite en esta segunda entrega, como Noelia Mourier (Coco), Naila Borensztein (No lo soporto) o la chilena Javiera Mena, entre otras. Pero el proyecto levanta el perfil con las incorporaciones de Julieta Venegas, Daniela Herrero y Déborah de Corral.

El proceso para Se puede fue el mismo que con el elogiado Papá: Martí y Kronenberg enviando correos electrónicos y demos a las artistas, junto con la invitación a sumarse. "No estamos para nada cerrados. Y no pensamos que alguien podría modificar lo que queremos hacer por ser más mainstream. Nosotros no lo somos, es verdad, pero yo me siento cercano en un montón de cosas a Julieta Venegas. De última, no me parece tan lejana como otras personas en estilo musical", explicó Martí.

Se puede es básicamente pop con sintetizadores que, por momentos, parece anclado en los primeros `80. Así, por dar un caso, Déborah de Corral, en No se usa más (0-600 vos), hace recordar a la Fabiana Cantilo de Detectives. Y es un pop que puede ser diáfano en la voz de Noelia Mourier, en el tema que da nombre al disco, o algo más perturbador, como en Consejos negros, con Mariana Baraj, o Carne humana, con la voz de Naila Borensztein. Como una vieja película de Disney: amable en las formas, pero al raspar un poco en el contenido ... De todos modos, Martí, con la ayuda de Kronenberg, pega zarpazos. Uno, por ejemplo, al reggaetón, en El día del zarpado.

Otro, a la cumbia, en la misma Consejos negros. Y al hillbilly, en Convoy, con Daniela Herrero. O al eurodance que Anita Alvarez de Toledo (corista de Cerati) emprende en Tren.

Aunque las apropiaciones de estilos se apilen como ladrillos, la pared es bastante homogénea. Y esa homogeneidad se apuntala en las letras. Martí se revela como esa clase de compositores que sin problemas escribe canciones de mujeres en primera persona. "Es un ejercicio divertido y a veces funciona más que otras. No hay nada muy complicado. Todo más o menos está en lo cotidiano ... Y que sabemos también los hombres".

"Las mujeres somos todas una, mi amor /tu hermana, mamá y yo", seduce Emme en El día del zarpado. Así, a Lucas Martí lo parece guiar aquella frase del otro Martí (José, el cubano): "Aquí, en mi madre América, la hermosura besa en la mejilla a la mujer que nace". Y que canta.